Semana 42

 

Qué ha sucedido hasta el momento...

Desde la última vez, nos hemos saltado una carta no muy larga que Pablo escribió a Filemón, un miembro adinerado de la iglesia en Colosas. En la carta lo alentaba a perdonar a su esclavo fugitivo que se había convertido en seguidor de Jesús. Aunque esta carta tiene un capítulo de largo igual puede ayudarnos a pensar sobre como debemos alentar y perdonar a otros. Si prefieres puedes volver atrás y leer lo que dice la carta.

 

Qué ocurrió después...

El siguiente libro es una carta a los judíos que creían en Jesús, quienes son llamados hebreos y aunque no sabemos quien escribió esta carta, ciertamente que contiene muchas cosas importantes para ayudarnos con nuestra fe. Esta carta nos alienta como seguidores a pensar en que debemos hacer crecer nuestra fe en Jesús y no que nuestra fe en Jesús se mantenga tal cual como era en un principio, igual que cuando recién empezamos a conocer de él. Esto se asemeja a un bebe, ya que el bebe crece y no queda como bebe para siempre. ¡Vamos juntos a revisar el pasaje!

 

Qué debo leer...

Hebreos 5:11–6:3  (NVI) “Crecimiento y desarrollo en tu fe”
 

Sobre este tema tenemos mucho que decir aunque es difícil explicarlo, porque a ustedes lo que les entra por un oído les sale por el otro. En realidad, a estas alturas ya deberían ser maestros, y sin embargo necesitan que alguien vuelva a enseñarles las verdades más elementales de la palabra de Dios. Dicho de otro modo, necesitan leche en vez de alimento sólido. El que sólo se alimenta de leche es inexperto en el mensaje de justicia; es como un niño de pecho. En cambio, el alimento sólido es para los adultos, para los que tienen la capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo, pues han ejercitado su facultad de percepción espiritual.

Advertencia contra la apostasía

Por eso, dejando a un lado las enseñanzas elementales acerca de Cristo, avancemos hacia la madurez. No volvamos a poner los fundamentos, tales como el arrepentimiento de las obras que conducen a la muerte, la fe en Dios, la instrucción sobre bautismos, la imposición de manos, la resurrección de los muertos y el juicio eterno. Así procederemos, si Dios lo permite.

 

Reflexiona, opina y crea...

Ciertamente que este pasaje nos alienta mientras pensamos en nuestro crecer con Jesús. Imagina si tú te quedas como bebe por toda tu vida, solo tomando leche y sin comer los otros alimentos que te ayudarían a crecer sano y fuerte. Tanto como debemos preocuparnos por nuestra salud para poder crecer y desarrollarnos, así también debemos preocuparnos por nuestra relación con Jesús para que crezcamos y nos desarrollemos.

·         Toma una hoja de papel y divídela en dos.

·         Sobre un lado escribe algunas palabras, haz algunos dibujos o pega algunas imágenes de comidas o cosas que quieras cortar, las cuales te ayuden a crecer y a desarrollarte.

·         En el otro lado de la hoja, haz lo mismo con cosas que te ayudan a crecer en tu relación con Jesús.