Apocalipsis 5

09 de Diciembre de 2015

“El cordero, que fue sacrificado” es alabado en el trono de Dios

Preguntas para compartir

  • ¿Por qué piensas que Juan estuvo muy angustiado con esto (v 4)?
  • ¿Quién es el cordero (vs 6-14)?

 

Profundizando con “Palabras de vida”

En la época del apóstol Juan los pergaminos sellados eran documentos importantes. En este caso, el pergamino se selló con siete sellos - dispuestos de manera que a medida que cada sello fuese roto, el rollo podría desenrollarse un poco más. El pergamino contenía propósitos de Dios para lo que se avecinaba. El ángel pidió un voluntario para romper los sellos - alguien que fuese  "digno" para llevar a cabo este acto.

Cristo, el León de Judá, era el único digno para desbloquear los misterios de Dios. El único que podría poner en acción las fuerzas que traerán los propósitos de Dios a buen término. Porque él es el Cordero de Dios. Y así, toma el  pergamino del que estaba sentado en el trono. Mientras hace esto, los cuatro seres vivientes y los 24 ancianos se arrodillaron delante del Cordero, cantando una nueva canción:

Digno eres de recibir el rollo escrito y de romper sus sellos, porque fuiste sacrificado, y con tu sangre compraste para Dios gente de toda raza, lengua, pueblo y nación. (v 9).

Juan vio como todo esto sucedía, entonces escuchado las voces de "diez mil veces diez mil" ángeles que rodeaban el trono, cantando:

¡Digno es el Cordero, que ha sido sacrificado, de recibir el poder,  la riqueza y la sabiduría, la fortaleza y la honra. La gloria y la alabanza! (v 12)

¿Puede usted imaginar esta escena maravillosa y majestuosa? ¿Puedes oír  a todos los ángeles que cantan? Ahora, ¿puedes imaginar como será, un día, cuando estamos todos juntos ante el trono - y ante el Cordero de Dios? ¡Qué tiempos culto tendremos! ¡Qué glorioso futuro es el nuestro - para la eternidad!

¡Digno es el Cordero!

Oración

Señor, me cuesta tomar algo. Me siento modesto, sabiendo lo que me espera. ¡Alabado sea el Cordero! ¡Venga tu reino!