Apocalipsis 12

18 de diciembre de 2015 2015 
Por Philip Layton

Satanás sabe que se acorta su tiempo y ataca a los que confían en Jesús

Preguntas para compartir

Habiendo leído este capitulo, trata de responder las siguientes preguntas

  • ¿Quién es el dragón?
  • ¿Quién es el hijo varón nacido de la mujer?
  • ¿Quién es la mujer con 12 estrellas en su cabeza?

 

Profundizando con “Palabras de vida”

Tal como leemos en Apocalipsis pronto seremos conscientes de la guerra espiritual que existe a nuestro alrededor. Satanás está en contínuo conflicto con Dios y su pueblo. El mundo se ha convertido en un lugar hostil, por mucho amar y servir al enemigo.

La mujer descrita en este pasaje de las escrituras esta apunto de parir, pero Satanás, lleno de celos, buscará destruir al niño varón una vez nacido.

Luego tenemos al dragón. Satanás "que lleva a todo el mundo por mal camino" (v 9). Se le representa aquí con siete cabezas, cada una con una corona real. Un día, pronto tendrá la autoridad política. Los 10 cuernos significan poder absoluto. Su cola, que se utiliza como un arma, influye en el mundo, ya que barre sobre las naciones. El dragón controlará los asuntos del mundo, mientras la gente da la espalda a Dios. Habrá desastres políticos y sociales que aquejaran al mundo a causa de esta rebelión.

Estalla la guerra en el Cielo, mientras Miguel y los ángeles luchan contra dragón y sus ángeles. ¿El resultado? El dragón no puede matar a la mujer y el niño.

Finalmente, las bestias, una desde el océano, otra desde la tierra.  La primera tiene siete cabezas y diez cuernos, es un poderoso imperio, la maldad encarnada en una nación. La segunda bestia trabaja en conjunto con la primera, ambas sirven al dragón, Satanás. La segunda bestia tiene dos cuernos imitando a los de un cordero, como Cristo. El desciende y gana la apreciación de la gente aprovechándose de sus necesidades religiosas y económicas. Tras sus mentiras está la autoridad del infierno, su número es el 666.

Oración

Esto es algo complicado, lectura terrorífica. Señor no comprendo la mayoría de esto, así que Jesús despeja mi mente y corazón. Lléname con tu amor, tu gracia y tu paz, así que otros podrán ver algo de ti en mí. Señor Jesús, quiero ser leal a ti como siempre. Ayúdame a no decepcionarte, oro.  

Beverly Ivany