2 corintios 5

06 de Agosto de 2015
Por Philip Layton

Dios se reconcilió con el mundo por medio de Cristo


Preguntas para compartir

¿De qué manera pueden ser comparados nuestros cuerpos con las tiendas de campaña? (vs 1-4)
Aún cuando la salvación puede ser sólo  por fe. ¿El versículo 10 indica también que se puede ser juzgado por las obras?
¿Eres un embajador de Cristo que tiene el mensaje reconciliarse con él? (v 20)

 

Profundizando con “Palabras de vida”

Pablo realmente quería que los Corintios pensaran acerca de lo que los motivaba, lo que los inspiraba a seguir con fe y acercarse a los otros.  Todo se redujo a esto: es sólo el amor de Cristo que de verdad nos obliga a hacer algo que valga la pena. Sin importar lo que enfrentemos día a día, cosas que entregan felicidad o cosas muy difíciles. Todos predicamos en nombre de Cristo y todo esto lo hacemos por medio del gran amor de Dios.

El foco principal de todo lo que hacemos es el amor que Cristo tiene por nosotros, no nuestro amor por él. Él murió en la cruz por toda humanidad, por ti, por mí. Cada persona es objeto del eterno amor de Dios. Pablo quería amar a los otros tanto como Cristo lo amaba a él. Deberíamos hacer lo mismo, aunque ¿Cómo podemos amar como  lo hace Cristo?

Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, ha llegado ya lo nuevo! (v 17).

Somos una nueva creación, aunque el pecado sigue en el mundo; las fuerzas del mal siguen presentes,  aún no hemos ganado la batalla, pero hay una victoria.

Pablo le dijo a los Corintios que todo esto proviene de Dios, quien por medio de Cristo nos reconcilió consigo mismo y nos dió el ministerio de la reconciliación (v 18). Que vital es este ministerio. Hay que hacerles saber a los demás que se pueden reconciliar con Dios y vivir en una relación de confianza y obediencia.

En nombre de Cristo les rogamos que se reconcilien con Dios (v 20).

Hay que reconciliarnos con otro, entonces ir y reconciliarnos con los demás. Este es nuestro mando, nuestro ministerio como creyentes. Relaciones sagradas, relaciones de amor.

Oración:

Señor, ayúdame a llevar a los otros hacía a ti; para la reconciliación de los unos con los otros. Deja que comience conmigo.