Lucas 12

23 Marzo de 2015

 

Jesús enseña la parábola del rico insensato  y la necesidad de estar listo para el cielo

Preguntas para compartir

Miles de personas acudían a ver a Jesús. ¿Esto podría ser resultado del ministerio de los “72” en Lucas capítulo 10?
El versículo 7 dice “No tengan miedo" ¿Es esto compatible con los consejos acerca del temor a Dios en los versículos anteriores?
¿Cuál es la enseñanza de los versículos 35-46?

 

Profundizando con el libro “Palabras de vida”

Algunos lo llaman “La vía dolorosa”, otros  “El camino del dolor”, y hay quienes lo conocen como “El camino de la cruz”. Hoy, seguimos el camino que Jesús tomó desde el juicio hasta Gólgota, una ruta sagrada y santa.

Sabemos por medio de la escritura, que ciertas mujeres "lloraban y se lamentaban" y asumimos que para ciertos hombres también les era extremadamente difícil ver, como para  aquellos que de verdad creían que él era el Hijo de Dios y sin embargo, tenían demasiado miedo de ser descubiertos y admitir su lealtad.

Mientras caminaba, pude oír de alguna manera las burlas, las risas y los alaridos, y traté de imaginar cómo debió esto haber desgarrado el corazón de Jesús.  Pude ver a la multitud escupiéndolo y arrojándole cosas, pude sentir la atmósfera de ese día terrible y me pregunté cómo habría reaccionado si hubiese estado allí hace 2.000 años.

Hoy, las personas estaban gritando en el mercado hacia todas las direcciones: “¡Compra esto! ¡Haré un trato! ¡Tengo rebajas! ¡Aquí regalos! ¡Es tu día de suerte!... El personal militar pasó junto con sus armas. Había personas en todas partes, empujándose unas a otras, sin importar que estuviéramos caminando el Camino de la Cruz.

Mi corazón se agitó mientras caminaba, pensaba en la agonía, el dolor y el sufrimiento de Cristo.  Acabábamos de venir del lugar de donde, probablemente, fue encarcelado y también el lugar donde, sin duda,  fue torturado.

Ahora, durante este camino, la crucifixión y la muerte.

Cantamos, como grupo, el espiritual “¿Estabas allí cuándo crucificaron a mi Señor?” Todo lo que hizo por mí, por ti, por el mundo. Que jamás olvidemos, que nunca nos perdamos o nos quedemos en la multitud por miedo de permanecer con Cristo. Que probemos que somos fieles.

Oración

Jesús, gracias por ir a la cruz por mí. Que nunca olvide todo lo que hiciste para lograr mi salvación. ¡Te amo!