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27 de Noviembre de 2015 
Por Philip Layton

La obediencia a Dios demuestra nuestro amor por él

 

Preguntas para compartir

  • ¿De que formas la cristiandad es inclusiva y exclusiva (v 12)?
  • “Toda maldad es pecado” (v 17) ¿Es esta la mejor definición de pecado para el mundo moderno?

 

Profundizando con “Palabras de vida”

Juan sostenía firmemente que la fe en Jesús el hijo de Dios conquistaría el mundo. Aquellos que creían que Jesús era el Mesías prometido tendrían la victoria perpetua. ¿Por qué la fe están dinámica? Todo nace de la creencia en la encarnación. Dicha fe dice que Dios se preocupa tanto por la humanidad que milagrosamente entró y tomó parte de ella. Él nos conoce y esta con nosotros

La fe en Jesús como Cristo reconoce que él se enfrentó a lo peor del mundo e incluso encontró la muerte en la cruz, todo eso lo hizo por nosotros. La fe en Jesús como Cristo dice que creemos que él se levantará de nuevo victorioso sobre la muerte. Si creemos en él y en lo que ha hecho por nosotros, él nos puede llevar a la victoria.

¿Qué quiere decir Juan cuando señala que Jesús viene del agua y la sangre (v 6) Algunos opinan que Juan se refiere al agua y la sangre que brotó de Jesús mientras estaba en la cruz (Juan 19:34) Aunque la mayoría concuerda que esta referencia apunta al bautismo de Cristo y su crucifixión.

Aquí Juan puede contrarrestar una herejía gnóstica. El culto contemporáneo de Juan Cerintus enseñaba que Jesús era solo un hombre hasta su bautismo, cuando “el Cristo” descendió sobre él. Luego de su ministerio de enseñanzas y milagros, la parte de “Cristo”, incapaz de sufrir, dejó a Jesús sufrir y morir solo. Juan corrigió esto ya que hizo hincapié en que la muerte de Jesucristo era esencial para nuestra redención y que Jesús siempre fue Cristo.

Los tantos milagros que Jesús realizó son pruebas de quien es: las Escrituras lo atestiguan: Dios testifica a Jesús como el mesías en una ocasión primordial de su vida. El Espíritu Santo estuvo visualmente presente durante el bautismo de Cristo cuando Dios declaró verbalmente que era su hijo. Los discípulos escucharon la voz de Dios por Cristo. Los espectadores escucharon la voz de Dios en respuesta  a la oración de Jesús, quién glorificaba su nombre. Incluso durante su muerte, una maravilla única que testifica quien es Jesús. (Mateo 27:45-54) Que gran Salvador.

Evelyn Merriam